Un chaval infeliz escapa de un campamento de verano, lo que provoca la búsqueda de su millonario padre. Da con el chico Barker, pero en vez de comunicar su paradero, lo mantiene oculto y pide un rescate. Con lo que no cuenta Barker, una vez cobrado el dinero, es con la muerte accidental del muchacho. Aunque ni el dinero ni el cadáver se encuentran, Barker es detenido por extorsión y enviado a prisión. Allí sus codiciosos compañeros de celda están dispuestos a organizar una fuga para recuperar el botín.