En las profundidades de su aislada mansión, el anciano Hiram Stokley, que acaba de fallecer, recibe la visita de un encantador ángel del más allá: su mujer muerta Cecily. Esta le explica que existe una posibilidad para que vuelva a ser joven por un tiempo y entrar por la puerta grande del cielo: si realiza una buena obra en veinticuatro horas