Narciso Ibáñez Menta (Sama de Langreo, Asturias; 25 de agosto de 1912 - Madrid; 15 de mayo de 2004) fue actor y director teatral español. Reconocido como una leyenda del terror en los países de habla hispana, especialmente en Argentina, Uruguay y España. Con tan solo ocho días hizo su primera aparición en escena en brazos de la actriz Carola Ferrando. Durante su infancia viajó siempre junto a sus padres por España e Hispanoamérica para asentarse en Buenos Aires, donde se hizo famoso con el nombre de "Narcisín" y gozó de gran aprecio del público argentino entre 1919 y 1923 con obras como El pibe del corralón, El príncipe Cañamón, Meu Fillo!! y El niño de Río Tinto, entre otras. En 1934 se casó en Buenos Aires con la actriz argentina Pepita Serrador, con la que tuvo un único hijo, Narciso Ibáñez Serrador, actor, dramaturgo y director de programas de televisión, con el que colaboró en numerosas ocasiones. En sus inicios siguió los pasos líricos de sus padres, pero luego, tras afincarse en Buenos Aires, desarrolló una etapa intensa como actor y director teatral poniendo en escena obras clásicas y contemporáneas tales como Fausto de Goethe, La muerte de un viajante de Arthur Miller y Las manos sucias de Jean Paul Sartre. En 1933, en Buenos Aires, se inició en el género de terror que le iba a dar la fama, con una adaptación teatral de Doctor Jekyll y Mr. Hyde, seguida de una puesta en escena de El fantasma de la ópera. Dirigió varias obras y trabajó también como guionista de radio y televisión. Uno de sus mayores éxitos en TV fue El hombre que volvió de la muerte, en 1969, con libros de Abel Santa Cruz. Otra serie de terror en los años 80 fue El pulpo negro emitido por canal 9. Tras su regreso a España a comienzos de los sesenta, se dedicó casi con exclusividad a la televisión donde alcanzó su máxima popularidad. No obstante, ha hecho teatro y cine.